"Huellas y manchas", reseña Nº41

Cecilia tiene 17 años y cuida a su madre, enferma terminal. Al llegar la hora de la verdad, las preguntas no resueltas son más necesarias: ¿por qué la tuvo a ella mediante inseminación?, ¿por qué en Estados Unidos, sola, tan lejos de sus abuelos?, ¿qué esconde el pasado de su madre? Gracias a Emilio, un muchacho que vive encerrado en su casa y se comunica con el mundo únicamente mediante ordenadores, Cecilia descubrirá un secreto guardado durante años.

 

Cuando estaban juntas era incapaz de verter una sola lágrima o quejarse. Se tragaba el dolor como las pastillas...

Cecilia a sus 17 años tiene que cuidar de su madre... Su madre se muere a causa de un cáncer y necesita muchos cuidados... Cecilia soporta esta carga ella sola, pues de momento su madre no le quiere decir nada a sus padres...

¿Cómo se gastaban las últimas semanas de amor hacia una madre?

Así se podría resumir esta historia... Tal y como parece en la sinopsis es una lectura dura (puede que menos dura de lo que pensaba, pero lo es)... Es una historia sobre la superación de los problemas, sobre la positividad de las cosas...

-No, no lo es. Mueres como vives, para bien o para mal. No me arrepiento de nada, pero si en algo te he fallado... lo siento.

De los personajes está claro que el principal en esta historia es Cecilia, un personaje que no madura mucho durante el libro ya que cuando empiezas a leer ya te encuentras con una Cecilia muy adulta para su edad... La razón es que tiene que ver morir lentamente a su madre sin poder hacer nada más que intentar que ella esté bien... Es un personaje del que es imposible no encariñarse... El resto de personajes pasan por la novela pero no se profundiza mucho en ellos, quizá en el que más se profundiza sea en Emilio, un antiguo novio y amigo de Cecilia, que se ha convertido en un hikikomori y que ayudará a Cecilia a encontrar cosas de su pasado, así mismo Cecilia intentará ayudar a su amigo a que salga de esa burbuja tecnológica en la que vive... Aunque no se profundiza mucho en los personajes cada uno tiene su importancia en la historia, pues ellos son los que silenciosamente intentan ayudar a Cecilia dándole su apoyo incondicional... Tanto sus amigas como su ¿novio? la escuchan, dan su opinión y sobre todo intentan arrancarle una sonrisa para que por un momento olvide esa carga que pesa sobre sus hombros...

Mientras que ella seguía sin saber, si lo que sentía por él era amor o necesidad.

Es una historia dura que nos enseña como enfrentarse a situaciones duras... A parte de la enfermedad de su madre Cecilia tiene que lidiar con el hecho de que su madre la tuvo sola sin ayuda de nadie, no tiene ni idea de quien puede ser su padre y para colmo su hermano gemelo falleció cuando eran pequeños... Creo que ésta podría der una buena lectura para esos jóvenes que no valoran lo que tienen en casa, que hoy en día está a la orden del día... El tema del cáncer es algo que por desgracias a todos nos ha tocado vivir más cerca o más lejos y eso hace que ésta lectura sea más dura que otras... Nos recuerda aquello del "carpe diem" al que tan poco caso le hacemos...

-Nunca odies a quien hayas amado, cariño.

Una de las cosas que más me ha gustado es que sabiendo que el final se acerca la relación entre Cecilia y su madre mejora notoriamente gracias a su sinceridad, cosa que nos desvelará un sorprendente pasado de la madre de Cecilia... 

-No importa lo que te haya hecho. Ama. Si odias destruyes no sólo tu presente, sino también tu pasado. Y siembras de minas tu futuro, porque sigues viviendo bajo los efectos del resentimiento y la desconfianza.

Es un libro muy cortito, la letra es relativamente grande y su lectura es muy ágil... Así pues es perfecto para pasar una tarde entretenida mientras nos sumergimos en sus páginas... El final puede resultar demasiado feliz pero teniendo en cuenta que esta inspirado en una historia real, y que la vida sigue, me parece el broche perfecto para una lectura que me ha conmovido...

EL AUTOR

Jordi Sierra i Fabra (Barcelona, 1947) publicó su primer libro en 1972. Desde entonces, ha escrito más de cuatrocientas obras, muchas de ellas bestsellers, y ha ganado treinta premios literarios, además de recibir un centenar de menciones honoríficas y figurar en múltiples listas de honor. En 2006 y 2010 fue candidato por España al Nobel Juvenil, el premio Hans Christian Andersen, y en 2007 recibió el Premio Nacional de Literatura del Ministerio de Cultura español.

 
En 2004 creó la Fundació Jordi Sierra i Fabra en Barcelona y la Fundación Taller de Letras Jordi Sierra i Fabra en Medellín (Colombia), como culminación a toda una carrera y a su compromiso ético y social.

Más información en

- Página web de Jordi Sierra I Fabra

- Facebook de Jordi Sierra I Fabra





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Es un libro para disfrutar tranquilamente y con calma, para saborear cada una de sus frases... Un libro para emocionarse, llorar y acabarlo con una sonrisa...

Le doy un 4,5 de 5

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